Padre rico, padre pobre.
Sabemos que el dinero es necesario para cualquier negocio o persona. Pero con normalidad olvidamos que nuestra mente juega un papel muy importante en esto. Aquí te dejo las 5 mejores lecciones de este libro. -Padre rico, padre pobre-.
¡Qué alegría que juntos descubramos las maravillosas enseñanzas de este libro y que pueda aportar mucho valor a tu vida!
1. El activo más poderoso con el que contamos es nuestra mente:
Empecemos definiendo ¿Que es un activo? Un activo es algo que tiene valor y que de alguna u otra forma genera ingresos a tu vida.
“La inteligencia financiera significa, simplemente, tener más oportunidades, la suerte se crea, el activo más importante no es el dinero, que por cierto no es real, sino la mente.”
Aprender es una de las partes fundamentales para que puedas pensar diferente.
Dicen que a la lectura sólo hay que dedicar los ratos perdidos, que se pierde vida mientras se lee.
Lo cierto es que es un agradable pasatiempo para muchos, obligación para otros, pero leer es un beneficioso ejercicio mental.
Robert dice que las personas que piensan como ricos son aquellas que creen que lo más importante en sus vidas, no es el dinero, si no el conocimiento y la manera en la que lo aplicas en tu vida. ¡Vas por buen camino, mi querido amigo lector!
2. El fracaso es parte del éxito:
A medida que crecemos descubrimos que tenemos que luchar y ser muy astutos para lograr nuestros objetivos.
¡Está en ti poder superarlos!
Piensalo por un momento… ¿En que has convertido tus tropiezos?
Si has logrado sacarles provecho, vas por un buen camino. En cambio si no, nunca es tarde para aprender y mejorar.
Te dejo 7 acciones para pasar del fracaso al éxito.
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Cambia el enfoque del fracaso.
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Identifica qué es lo que puedes aportar a los demás.
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Revisa tus metas ¿Es lo que deseas alcanzar?
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Reconsidera: un fracaso no es siempre perder ni es el fin del mundo.
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Inspírate para el éxito.
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Solicita ayuda.
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Desarrolla hábitos para el éxito.
3. Uno a menudo se convierte en lo que estudia:
Sabemos que leer puede hacernos más cultos, brindarnos un vocabulario más amplio, acercarnos a nuevas temáticas e incluso ayudarnos a estudiar mejor.
Como una suma de todos los factores anteriores, podemos decir que leer nos hace más inteligentes pues nos permite conocer aspectos que hasta el momento desconocemos, nos permite acercarnos a otras realidades e incluso explorar nuevas temáticas.
Claro está que hay muchas formas de aprender:
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Aprendizaje visual.
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Aprendizaje auditivo.
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Aprendizaje táctil.
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Aprendizaje kinestésico.
¡Tú decides cuál es la mejor para ti!
4. La única diferencia entre la persona rica y la persona pobre está en cómo utilizan su tiempo:
Dedicar una hora como mínimo al día cada mañana para uno mismo, a solas y en silencio, es el primer paso para que nuestro tiempo nos rinda durante el resto del día.
Si dedicamos una hora al día para hacer varias actividades, estaremos más centrados en cada una de las cosas que debemos hacer porque primero habremos ordenado nuestros pensamientos. La realidad es que una vez que salimos de casa ya el tiempo no es nuestro y pasa a ser de los demás. Nuestra mente está desorientada y tendemos a desperdiciar más el tiempo.
Si quieres que tu tiempo te rinda realmente, el primer paso que debes tomar es levantarte una hora más temprano de lo que normalmente lo haces y dedicarla para ti. La mejor hora es de 5:00 am a 6:00 am. Como una vez me dijo mi jefe: Ve paso a pasito para ver resultados. Hazlo como un hábito y verás la diferencia.
5. Haz hoy lo que quieres para tus mañanas:
Debemos despertar nuestros genios financieros para poder ver el mundo de una forma diferente y aprovechar las estrategias.
No tengas miedo de arriesgarte, recuerda que la vida está echada al azar, pero siempre se claro en tus objetivos, de esta manera será más fácil poder conocerte a ti mismo.
¡Conviértete en la mejor versión de ti!
Karen Montejo
